miércoles, 1 de junio de 2011

Las sucursales bancarias cortan el crédito para las Pymes.

La Comisión Nacional del Mercado de Valores se encuentra alertada por el peligro de la total dependencia de la financiación bancaria.


            El grifo del crédito ha sido cerrado por las entidades bancarias (a pesar de que paradójicamente viven de ello). Esto preocupa de forma extraordinaria a la CNMV. El presidente del supervisor, Julio Segura, compareció recientemente en el Congreso de los Diputados con objeto de explicar la actividad de la institución en 2010. El informe de la CNMV, con el que se ilustra la explicación, dedica un capitulo completo a la financiación empresarial Española. En este se hace saber: que la crisis ha incrementado la importancia del crédito bancario en los sistemas de financiación. El acceso al mercado de crédito se restringe a la gran empresa. En contrapartida a esta situación fáctica, la pequeña y mediana empresa (PYME) representa la mayor parte del tejido empresarial español, siendo ésta a su vez la que de mayor manera depende del crédito bancario. "Las empresas de menor tamaño se enfrentan en estos momentos a unos retos especialmente exigentes en cuanto a sus posibilidades y condiciones de financiación futuras", advierte la CNMV. "En particular, la previsible persistencia en la moderación del flujo de crédito bancario iniciada con la crisis, junto con la progresiva puesta en práctica de un marco prudencial más estricto, apuntan hacia una menor capacidad de intermediación por parte del sector bancario que podría ser más acusada en el caso de la financiación destinada a las pymes".  
          
             La CNMV concluye que la necesidad de financiación de las empresas españolas se ha incrementado de manera importante en las últimas décadas.
Un dato que refleja dicho hecho es el siguiente, la financiación anual (excluyendo los bancos) ha pasado del 15% del Producto Interior Bruto al iniciarse la década de los 90 a  llegar alcanzar niveles próximos al 30% en los momentos cercanos a la crisis actual.
La CNMV indica que el detrimento del peso relativo de los mercados frente al sector bancario en este momento ha venido acompañado de dos inclinaciones. Primero la disminución del uso de los fondos propios como fuente de financiación, la segunda causa es el incremento en el requerimiento a la financiación llegada del exterior.
Uno de los factores determinantes que han provocado los cambios en la captación de recursos, encabezando el crédito bancario frente a otros sistemas, es la incorporación al euro, la cual provocó un importante detrimento de los tipos de interés reales.
Otro de los factores por los que se explica el apogeo de los créditos bancarios es el elevado crecimiento de dos sectores que de manera masiva han necesitado de este tipo de financiación, estos son el constructor y el inmobiliario. También destaca la CNMV la gran competencia que encontramos entre las entidades de crédito, lo que ha dado lugar a un abaratamiento de los créditos. El supervisor indica sobre este punto con objeto de llamar la atención a la escasa competencia de los mercados financieros españoles: "No parecen haber registrado una presión competitiva dentro del propio sector tan elevada como la evidenciada en el sector bancario en los últimos años".
Es por todo esto por lo que a la CNMV no le parece positiva esta descompensación por ello solicita que en España los mercados tengan un mayor protagonismo, ya que "pueden amortiguar las caídas en el crédito bancario durante las recesiones".



El gobierno incentiva fiscalmente ERE de empresas en beneficios.


Los expedientes reguladores de empleo aumentan en un 15% en grandes compañías. Los trabajadores afectados aumentan en un 210%, el Ejecutivo se escandaliza pero a pesar de ello lo fomenta con una importante paliativo tributario.


Madrid se escandaliza con el ERE de Telefónica. La compañía española supera los 10.000 millones de beneficio en 2010. El gobierno incentiva la operación con estímulos fiscales para las empresas.
Entre los estímulos encontramos ejemplos como la eliminación del mantenimiento de empleo en la libre amortización en el Impuesto de Sociedades. Desde que este tipo de medidas se han adoptado se han incrementado en un 210% los trabajadores afectados por expedientes reguladores de empleo de grandes compañías, lo que supone un incremento en el cómputo de empresas de un 11,41%.
El incentivo a la libre amortización permite deducirse anticipadamente inversiones en el año en que se realizan. Ello permite anticipar el gasto fiscalmente y retrasar el pago del impuesto.
Según palabras, de la propia subdirectora del Impuesto sobre Sociedades de la Agencia Tributaria Begoña García Rozado, es éste el mayor estímulo fiscal que podemos encontrar en la legislación española. El 18 de noviembre Zapatero afirmó que se mantendrá la libre amortización hasta el año 2015 para todas las empresas.
En el caso de telefónica el Expediente Regulador de Empleo afecta ya a 8.500 trabajadores.
El secretario de la Organización de Inspectores de Hacienda, Francisco de la Torre, advirtió entonces de que la medida fomentaría los despidos, también previno que “la extensión de la libertad de amortización puede tener un coste muy importante en la pérdida temporal de recaudación en el Impuesto sobre Sociedades y si se quiere mantener la credibilidad en la previsión de déficit para 2011, habría que detallar qué impuestos se van a subir o que recortes de gastos adicionales se van a producir”. Y zanjó: “También puede tener un coste en términos de empleo, al eliminarse el requisito de mantenimiento de plantilla”.

Hay que recordar que sólo las grandes empresas se benefician del precedente incentivo pues las PYMES no pueden acceder al crédito, por lo que no invierten. Todo esto sin hablar de las que se encuentran en pérdidas.
La subdirectora del Impuesto sobre Sociedades de la AEAT ha asumido el perjuicio que el incentivo causará a la recaudación del impuesto, que en este momento cae en picado. Hasta este momento los datos conocidos no permiten realizar predicciones con un contenido de certeza inimpugnable.
La alarma social acaecida con el conocimiento de la noticia sobre el Expediente Regulador de Empleo de Telefónica ha hecho que el grupo socialista haya propuesto enmiendas al Proyecto de Ley de Medidas urgentes para la mejora de la empleabilidad y la reforma de las políticas activas de empleo, con objeto de que las empresas en beneficios que procedan a despedir a trabajadores con más de 50 años realicen aportaciones al Tesoro Público, esto tardará en ser una realidad. Éste es el momento, para las grandes empresas, de realizar despidos, o por lo menos esto es lo que ha querido el gobierno. Mientras tanto tendremos que dejar que el transcurso del tiempo nos facilite nuevos datos referentes al asunto.